Mejorar las habilidades sociales te va a producir importantes beneficios personales.
Vas a conseguir aumentar tu competencia interpersonal, por ejemplo, iniciando y manteniendo conversaciones, dando las gracias, pidiendo disculpas, mostrando opiniones diferentes, etc. De esta manera tu círculo de amistades puede ampliarse. Además, si alguna vez surge un conflicto, podrás resolverlo haciendo valer tus derechos, pero sin llegar a comportamientos violentos.
También te va a ayudar a conseguir éxitos personales en tus relaciones con los demás.
A todos nos gusta que nos respeten. Cuando se ponen en juego las habilidades sociales de manera eficaz, las personas con las que nos relacionamos se dan cuenta que los respetamos y valoramos, lo cual favorece la opinión que tienen de nosotros/as.